Un cristo del jueves santo que destaca para mí en ese día y desbanca a los demás con todo respeto...MI PASIÓN
Mi Cristo de Pasión...un gran cariño me une a él puesto que ha formado parte de la vida de mi abuela, una persona a la que jamás olvidaré y que no perdonaba ni un día sin verlo...
Visita tras visita a su templo del Salvador, donde allí está firme esperando uno a uno a sus fieles...con su mirada cabizbaja y sin fuerzas para levantar su rostro...Ese rostro que me miraba de pequeña, cuando con ella lo iba a visitar...
Aun recuerdo ese olor característico de la iglesia cuando allí me sentaba con ella y me embobaba esa carita de él...
Al verlo en las andas de su paso con la cruz a hombros, da la sensación de que va a echar a andar en cualquier momento, su breve paso delante de los miles de ojos que lo contemplan irradia un gran desasosiego y devoción
Un Cristo que para mi no puede ser más perfecto...silencioso pasea por las calles de su ciudad observando uno a uno las caritas de entusiasmo de sus hijos sevillanos...
No tengo palabras...solo mostrar su imagen...que ya es mucho...
1 comentario:
Qué bonita entrada Ana.
La verdad que es imperdonable perderse a Nuestro Padre Jesús de la Pasión en el ocaso del Jueves Santo...
Yo suelo ver su salida del Templo y luego su vuelta por la calle Francos.
Besitos!!
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